El Duende de Estrellas y el Ave Arcoíris
Personajes: Un duende de estrellas, un ave arcoíris
Contexto y Escenario: En un jardín donde los árboles crecen al revés.
El Duende de Estrellas y el Ave Arcoíris
En un jardín donde los árboles crecen al revés, las raíces se elevan hacia el cielo mientras las copas se hunden en el suelo. Este lugar mágico es el hogar de un duende de estrellas llamado Lúmen. Sus ojos brillaban como pequeñas constelaciones y siempre llevaba consigo un saco lleno de polvo estelar.
Un día, mientras Lúmen recogía destellos de luz entre las hojas, escuchó un hermoso canto. Siguiendo la melodía, se encontró con un ave arcoíris que revoloteaba entre las ramas. Sus plumas relucían en todos los colores habidos y por haber, creando un espectáculo deslumbrante.
- Hola, pequeño duende - dijo el ave con una sonrisa -. Soy Celestia, guardiana de los sueños. ¿Qué haces en este jardín tan peculiar?
- Recojo polvo de estrellas para iluminar los sueños de los niños - respondió Lúmen.
Celestia se acercó y le mostró un árbol que, a pesar de estar al revés, florecía con flores que nunca habían visto. - Este jardín es especial - explicó -. Al igual que nuestros sueños, a veces las cosas más extraordinarias pueden parecer extrañas.
- Tienes razón - dijo Lúmen, maravillado. - La belleza está en la diversidad y en lo inesperado.
Juntos decidieron hacer un pacto: cada noche, Lúmen esparciría polvo de estrellas mientras Celestia cantaba dulces canciones. Así, el jardín se llenó de luces y melodías, uniendo sus talentos en un espectáculo inolvidable.
Desde aquel día, el duende y el ave aprendieron que el verdadero milagro ocurre cuando se abrazan las diferencias. Y así, con el brillo de las estrellas y el canto del arcoíris, todos los sueños del jardín se hicieron realidad.
Colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Lo pasamos por un zapatito roto... y mañana te cuento otro.
Autor: Generado con IA, prompt por Fernanda Moya.
Este cuento es de la categoría: Fantasía
Imágenes y textos creados mediante IA.
La belleza y la magia surgen cuando aceptamos y celebramos nuestras diferencias.
