El Fénix y el Lago de Historias
Personajes: Un niño, un fénix
Contexto y Escenario: En un lago de agua cristalina donde las piedras cuentan historias.
El Fénix y el Lago de Historias
Había una vez un niño llamado Lucas que vivía cerca de un lago de agua cristalina. Este lago era especial, ya que las piedras en su fondo contaban historias de tiempos pasados. Lucas pasaba horas escuchando susurros de aventuras antiguas y leyendas olvidadas.
Un día, mientras jugaba cerca del agua, notó un destello brillante en la superficie. Al acercarse, vio un hermoso fénix surcando el cielo, con plumas de fuego que iluminaban todo a su alrededor. Fascinado, Lucas gritó: “¡Es el fénix! ¡El ave mística!”
El fénix, al escuchar su voz, descendió con gracia y se posó en una roca. “Hola, pequeño soñador”, dijo con una voz melodiosa. “He venido a mostrarte la magia de este lugar.”
Intrigado, Lucas preguntó: “¿Por qué hay tantas piedras en el lago?” El fénix sonrió y respondió: “Cada piedra guarda una historia, una lección. Pero la más importante es la que tú decidas contar.”
Con un toque de su ala, el fénix hizo que el agua cobrara vida. Las imágenes de valientes héroes y bondadosas criaturas danzaron ante los ojos de Lucas. El niño comprendió que cada historia, por triste o alegre que fuera, tenía un propósito.
Al caer la noche, el fénix le dijo: “Cada vez que mires este lago, recuerda que tú también puedes crear tu propia historia. La vida es un viaje lleno de enseñanzas.” Con esas palabras, el fénix se elevó hacia el cielo, dejando una estela dorada a su paso.
Desde entonces, Lucas supo que en cada piedra del lago había una lección y que él era el autor de su propia narrativa.
Colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Lo pasamos por un zapatito roto... y mañana te cuento otro.
Autor: Generado con IA, prompt por Fernanda Moya.
Este cuento es de la categoría: Aprendizaje
Imágenes y textos creados mediante IA.
Cada experiencia en la vida cuenta una historia, y siempre podemos aprender de ellas.
