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Personajes: Un unicornio, un dragón
Contexto y Escenario: En un lago que refleja los deseos del corazón.

El Lago de los Deseos

Era una noche estrellada en el reino de Luminara, donde un hermoso lago relucía en medio de un bosque encantado. Este lago era especial, pues reflejaba los deseos más profundos del corazón de quien lo mirara.

En las orillas del lago vivía un unicornio llamado Estrella, cuya crin brillaba como la luna. Estrella, dulce y soñador, pasaba sus días explorando el bosque, pero anhelaba encontrar un amigo con quien compartir su magia.

Una tarde, mientras contemplaba su reflejo en el lago, vio un destello de luz y, para su sorpresa, apareció un dragón de escamas resplandecientes, llamado Brío. Con sus alas enormes y su cola brillante, Brío se acercó volando al lago, curioso por el reflejo que lo había atraído.

“Hola, soy Estrella. ¿Qué deseas ver en el lago?” preguntó el unicornio con alegría.

Brío sonrió y respondió: “Quiero encontrar un amigo que entienda mi verdadero yo.”

Estrella le mostró su reflejo, donde ambos aparecían juntos, sonriendo y compartiendo aventuras. “Tal vez, lo que buscamos ya está aquí, en el corazón de este lago,” dijo Estrella, con su voz suave.

Desde esa noche, el unicornio y el dragón se hicieron inseparables. Juntos volaron sobre el lago, creando magia con sus risas, y descubrieron que la verdadera amistad se forja cuando dos corazones se encuentran y aceptan sus diferencias.


Colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Lo pasamos por un zapatito roto... y mañana te cuento otro.
Autor: Generado con IA, prompt por Fernanda Moya.

Este cuento es de la categoría: Hadas
Imágenes y textos creados mediante IA.



La verdadera amistad florece cuando somos sinceros sobre nuestros deseos y nos aceptamos mutuamente.

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