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Personajes: Un hada, un duende
Contexto y Escenario: En un bosque donde las sombras tienen vida propia.

El Hada y el Duende en el Bosque de Sombras

En un bosque encantado, donde las sombras tenían vida propia, un hada llamada Lira y un duende llamado Tiko compartían una amistad especial. Los árboles murmuraban secretos, y las sombras danzaban a su alrededor, creando un ambiente de misterio.

Una noche, mientras la luna iluminaba el camino, Lira y Tiko decidieron explorar un rincón del bosque que nunca habían visitado. Al adentrarse más, las sombras comenzaron a cobrar forma y a girar alrededor de ellos, como si quisieran advertirles de algo.

"Mira, Tiko", dijo Lira, "las sombras parecen tener algo que decir". El duende, curioso, asintió y se acercó. Pronto, las sombras comenzaron a mostrar imágenes: amigos perdidos, momentos felices y también algunas tristezas.

De repente, una sombra más oscura y alargada se acercó a ellos, erguida como un gigante. Con una voz profunda, dijo: "No temáis, pequeños amigos. Vengo a recordarles que las sombras también son parte de la vida. A veces, las experiencias difíciles nos enseñan a valorar los momentos felices".

Lira y Tiko se miraron, comprendiendo que en el bosque de sombras había un profundo significado. Decidieron, entonces, que cada vez que se sintieran tristes, buscarían esas sombras para recordar que siempre existe una luz, aunque a veces sea tenue.

Con el corazón más ligero, los dos amigos regresaron a su hogar, prometiendo nunca olvidar la lección de aquel encuentro. Desde aquel día, cada vez que miraban las sombras, sonreían, sabiendo que eran simplemente parte de un hermoso viaje llamado vida.


Colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Lo pasamos por un zapatito roto... y mañana te cuento otro.
Autor: Generado con IA, prompt por Fernanda Moya.

Este cuento es de la categoría: Hadas
Imágenes y textos creados mediante IA.



Las sombras son parte de nuestra vida y nos enseñan a apreciar la luz y los momentos felices.

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