Personajes: Una sirena, un unicornio
Contexto y Escenario: En un océano donde los corales forman ciudades bajo el agua.
Había una vez, en un océano donde los corales formaban vastas ciudades bajo el agua, una sirena llamada Marina. Ella era conocida por su hermosa voz y su gran corazón. Un día, mientras nadaba entre los brillantes corales, se encontró con un unicornio que había caído de un arcoíris mágico y se encontraba perdido en el mar.
El unicornio, llamado Estelar, era un ser especial que brillaba con una luz radiante. Tenía miedo y no sabía cómo volver a su hogar. Marina, viendo su tristeza, decidió ayudarlo. Juntos exploraron los coloridos jardines de coral, disfrutando de los peces que danzaban a su alrededor y los delfines que saltaban con alegría.
Marina le mostró a Estelar los escondites secretos y las maravillas del océano. A medida que pasaba el tiempo, ambos se hicieron grandes amigos. La sirena aprendió que la magia del océano era diferente a la del cielo, pero igual de hermosa. Estelar, por su parte, descubrió que la amistad y la bondad podían iluminar incluso los lugares más oscuros.
Finalmente, llegaron a una cueva de perlas donde todos los colores del arcoíris parecían converger. Allí, una luz mágica apareció y le permitió a Estelar regresar a su hogar en el cielo. Antes de irse, el unicornio le prometió a Marina que siempre llevaría su recuerdo en su corazón.
Marina sonrió y, con una lágrima de alegría, entendió que la amistad trasciende todos los mundos, ya sea bajo el agua o sobre las nubes. A partir de entonces, cada vez que miraba al cielo, sabía que su amigo siempre estaría allí, brillando junto a las estrellas.
La verdadera amistad supera cualquier distancia y puede conectar los mundos más diferentes.