Personajes: Un ratón, una rana, una tortuga, un pájaro
Contexto y Escenario: En un lago tranquilo, el ratón, la rana, la tortuga y el pájaro buscan una flor mágica que florece solo de noche.

La búsqueda de la flor mágica

Una noche estrellada, en un lago tranquilo, un pequeño ratón llamado Milo se reunió con sus amigos: Rita la rana, Tula la tortuga y Pipo el pájaro. Ellos habían escuchado de una hermosa flor mágica que solo florecía de noche y brillaba como las estrellas.

Decididos a encontrarla, comenzaron su búsqueda. Rita, con su salto ágil, lideraba el camino, mientras Milo corría rápidamente detrás de ella. Pipo volaba alto, buscando desde el aire cualquier indicio de luz, y Tula, aunque lenta, siempre decía que la paciencia era clave.

Después de un rato, llegaron a una orilla cubierta de juncos. Allí, Milo, emocionado, gritó: “¡Miren, veo algo brillante!” Todos se acercaron y descubrieron una flor dorada, iluminada por la luna. Pero al intentar tocarla, se dieron cuenta de que necesitaban trabajar juntos para poder acercarse sin dañarla.

Así que, con mucho cuidado, Tula se metió en el agua para sostener los juncos, mientras Pipo volaba y guiaba a los demás. Rita saltaba de un lado a otro, asegurándose de que todos estuvieran en su lugar. Finalmente, juntos, lograron contemplar la belleza de la flor mágica.

Contentos y llenos de alegría, decidieron que la verdadera magia no era solo la flor, sino el esfuerzo y la amistad que los unió para encontrarla. Al amanecer, la flor comenzó a marchitarse, pero sus corazones estaban llenos de luz.

Colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Lo pasamos por un zapatito roto... y mañana te cuento otro.
Autor: Generado con IA, prompt por Fernanda Moya.

Este cuento es de la categoría: Amistad
Imágenes y textos creados mediante IA.



Enseñanza del cuento

La verdadera magia se encuentra en el trabajo en equipo y la amistad.

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