Personajes: Un caballo, un perro, una cabra, una vaca, un pato
Contexto y Escenario: En un río bajo la luna, el caballo, el perro, la cabra, la vaca y el pato encuentran una piedra que resplandece con la luz de las estrellas.
Una noche serena, bajo la luz de la luna, un caballo, un perro, una cabra, una vaca y un pato estaban juntos junto al río. Las estrellas brillaban con fuerza y el reflejo de la luna dibujaba caminos de luz sobre el agua.
Mientras paseaban, el caballo, que era muy curioso, notó algo que resplandece en la orilla. Se acercó y encontró una hermosa piedra que brillaba con la luz de las estrellas. Intrigados, los demás animales se acercaron.
“¡Miren lo que he encontrado!” exclamó el caballo. La piedra era mágica, y cada uno podía hacerle una pregunta.
El perro preguntó: “¿Cómo puedo ser un mejor amigo?” La piedra titiló y respondió en un suave susurro: “Escucha con el corazón”.
La cabra preguntó: “¿Qué debo hacer para ser feliz?” La luz de la piedra danzó y le dijo: “Disfruta de cada momento y sé tú misma”.
La vaca, con su calma, preguntó: “¿Cuál es el secreto de la paz?” La piedra brilló intensamente y contestó: “La comprensión entre los seres”.
El pato, emocionado, preguntó: “¿Cómo puedo aprender a volar mejor?” La piedra brilló y respondió: “Confía en tus alas y jamás dejes de intentarlo”.
Por último, el caballo preguntó: “¿Cuál es la verdadera riqueza de la vida?” La piedra resplandeció con un brillo que iluminó todo a su alrededor y respondió: “La amistad y el amor que compartas”.
Agradecidos, los animales se unieron en un abrazo, comprendiendo que lo más valioso que tenían era su compañía. Con el corazón lleno, regresaron a casa, sabiendo que siempre estarían juntos.
La verdadera riqueza de la vida se encuentra en la amistad y el amor que compartimos con los demás.