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Personajes: Un hada, un unicornio
Contexto y Escenario: En un lago encantado donde las estrellas caen como lluvia.

El Lago de las Estrellas Caídas

En un mágico lago encantado, donde las estrellas caen como lluvia y iluminan cada rincón, vivía un hada llamada Lira. Sus alas brillaban con los colores del atardecer y su risa era como el sonido de las burbujas en el agua.

Cerca del lago, había un precioso unicornio llamado Estelar. Su melena era un arcoíris y sus ojos reflejaban la luz de las estrellas. Cada noche, el unicornio venía a beber agua del lago, fascinado por su belleza.

Una noche, mientras las estrellas llovían suavemente, Lira vio a Estelar triste y decidió acercarse.

—¿Por qué estás tan triste, querido unicornio? —preguntó Lira, con un tono suave.

—Siento que nunca podré tocar las estrellas que caen —respondió Estelar, mirando hacia el cielo.

Lira sonrió y le respondió:

—Las estrellas son especiales porque nos enseñan a soñar. Pero a veces, lo que buscamos está más cerca de lo que pensamos.

Intrigado, Estelar miró al agua del lago y vio su reflejo rodeado de estrellas brillantes. Comprendió que, aunque no pudiera tocar las estrellas, podía brillar como ellas desde su propio ser.

—Tienes razón —dijo Estelar, sonriendo—. Puedo ser mi propia estrella.

Desde entonces, cada noche, el unicornio galopaba alrededor del lago, dejando un rastro de luz y magia, mientras el hada lo observaba con alegría. Ambos aprendieron que la verdadera luz no siempre proviene de lo alto, sino que a veces brilla desde adentro.


Colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Lo pasamos por un zapatito roto... y mañana te cuento otro.
Autor: Generado con IA, prompt por Fernanda Moya.

Este cuento es de la categoría: Fantasía
Imágenes y textos creados mediante IA.



La verdadera luz y magia que buscamos a veces se encuentran dentro de nosotros mismos.

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