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Personajes: Un caballo, un perro, una cabra, una vaca, un pato
Contexto y Escenario: En un lago bajo la luna llena, el caballo, el perro, la cabra, la vaca y el pato descubren una flor que nunca se marchita.

La Flor Eterna del Lago

En una noche mágica, bajo la luz de la luna llena, un caballo, un perro, una cabra, una vaca y un pato se reunieron junto a un lago cristalino. Todos eran amigos y disfrutaban de las noches estrelladas juntos.

Mientras paseaban por la orilla, el pato se dio cuenta de algo brillante en el centro del lago. Curioso, se acercó y, al hacerle señas a sus amigos, todos se alinearon a su lado.

En medio del agua, una hermosa flor de colores vibrantes florecía, iluminada por la luz de la luna. A pesar de que el viento soplaba suavemente y las olas danzaban, la flor permanecía firme y radiante, como si nunca pudiera marchitarse.

El caballo, con su voz profunda, dijo: “¿Cómo puede ser que una flor brille tanto y nunca se muestre triste?” La vaca, reflexionando, añadió: “Quizás es porque siempre ve lo hermoso que la rodea.”

La cabra, en su alocada sabiduría, propuso: “Tal vez su secreto sea que se alegra de cada momento que vive.” El perro, con su leal corazón, se emocionó y comentó: “Debemos aprender de ella y recordar siempre apreciar lo que tenemos.

Así, bajo la luz de la luna plena, nuestros amigos decidieron que cada vez que se sintieran tristes o desanimados, recordarían la flor inmortal en el lago y todo lo bello que les rodeaba. Con esa nueva enseñanza, se despidieron del lago, llevando consigo la luz de la flor eterna en sus corazones.


Colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Lo pasamos por un zapatito roto... y mañana te cuento otro.
Autor: Generado con IA, prompt por Fernanda Moya.

Este cuento es de la categoría: Moraleja
Imágenes y textos creados mediante IA.



La verdadera felicidad viene de apreciar y valorar cada momento y lo que tenemos en nuestra vida.

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