Personajes: Ricitos de Oro, los tres osos. Contexto: Una niña entra en la casa de tres osos y prueba su comida, sillas y camas antes de ser descubierta.

Ricitos de Oro y los Tres Osos

Había una vez una niña llamada Ricitos de Oro que paseaba por el bosque. Un día, se encontró con una cabaña habitada por tres osos: Papá Oso, Mamá Osa y Bebé Oso. Sin pedir permiso, entró en la casa y comenzó a explorar.

Primero probó la sopa de Papá Oso, pero estaba demasiado caliente. Luego, la sopa de Mamá Osa, que era demasiado fría. Finalmente, la sopa de Bebé Oso era perfecta, así que se la comió toda.

Después, Ricitos de Oro se sentó en las sillas. La silla de Papá Oso era demasiado grande, la de Mamá Osa era demasiado blanda, pero la silla de Bebé Oso era justo lo que necesitaba. Sin embargo, al sentarse, rompió la silla.

Finalmente, subió a la habitación y probó las camas. La cama de Papá Oso era demasiado dura, la de Mamá Osa demasiado blanda, pero la de Bebé Oso era perfecta. Se quedó dormida en ella.

Cuando los osos regresaron a casa, notaron que alguien había estado allí. Al descubrir a Ricitos de Oro durmiendo en la cama de Bebé Oso, se llevaron un gran susto. La niña se despertó, vio a los tres osos y salió corriendo de la cabaña, prometiendo no volver a entrar sin permiso. Desde entonces, aprendió la importancia de la privacidad y el respeto por el hogar de los demás.

Colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Lo pasamos por un zapatito roto... y mañana te cuento otro.
Autor: Robert Southey, Texto adaptado por IA.

Este cuento es de la categoría: Cuentos Tradicionales
Imágenes y textos creados mediante IA.



Enseñanza del cuento

El respeto por la propiedad ajena y la importancia de pedir permiso son valores fundamentales.

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