Loading...

Personajes: La princesa, el príncipe, la reina. Contexto: Una joven es probada para ver si realmente es una princesa al dormir sobre un guisante debajo de muchos colchones.

La Princesa y el Guisante

Había una vez un príncipe que quería casarse con una verdadera princesa. Sin embargo, había tantas impostoras que no podía distinguir a la auténtica. Un día, durante una tormenta, apareció en el castillo una joven cubierta de barro, clamando ser una princesa.

El rey, curioso por verificar su identidad, decidió realizar una prueba. Colocó un pequeño guisante en el fondo de una pila de veinte colchones y veinte edredones. La princesa debía dormir allí y si sentía el guisante, sería una verdadera princesa.

La joven se acomodó en la cama y, al amanecer, se quejó de no haber podido descansar porque algo duro la había molestado durante la noche. El rey y la reina se alegraron, pues solo una verdadera princesa sería tan sensible como para notar un guisante entre tantas capas.

Así, el príncipe encontró a su verdadera princesa, y se casaron felices. Desde entonces, todos en el reino supieron que la sensibilidad y la delicadeza son características verdaderamente royal.


Colorín colorado, este cuento se ha acabado.
Lo pasamos por un zapatito roto... y mañana te cuento otro.
Autor: Hans Christian Andersen, Texto adaptado por IA.

Este cuento es de la categoría: Cuentos Tradicionales
Imágenes y textos creados mediante IA.



La verdadera nobleza se refleja en la sensibilidad y la honestidad de una persona.

Descargar como PDF