Personajes: Un dragón, un caballero, una bruja
Contexto y Escenario: En un castillo antiguo, el dragón, el caballero y la bruja buscan una poción mágica perdida.
En un antiguo castillo, donde las piedras susurraban secretos, vivía un dragón llamado Drago, cuyo aliento podía iluminar la noche. A su lado, había un valiente caballero llamado Sir Arturo, siempre listo para defender el reino. Pero había una tercera habitante del castillo: una astuta bruja llamada Esmeralda, famosa por sus curiosos hechizos.
Un día, Drago se dio cuenta de que la esencia de su fuego se estaba desvaneciendo, y solo podía recuperarla con una poción mágica que había sido perdida hace siglos. Así que, en una reunión en el gran salón del castillo, el dragón, el caballero y la bruja decidieron unir sus fuerzas para encontrarla.
Tras muchas horas de búsqueda en las frías cavernas del castillo, llegaron a una sala oculta. En el centro, sobre un antiguo pedestal, descansaba un frasco brillante. ¡Eran la poción mágica y su luz resplandecía como mil estrellas!
Sin embargo, un gran problema surgió: la poción solo podría ser utilizada por aquel que pudiera demostrar su valentía y sabiduría. Drago, aunque temía, decidió dejar que Sir Arturo probara su valor. El caballero, con el corazón palpitante, enfrentó una serie de acertijos que la bruja le lanzó.
Con ingenio y coraje, Sir Arturo resolvió cada enigma, demostrando que la verdadera valentía no solo reside en el combate, sino en el conocimiento y la inteligencia.
Finalmente, la poción fue utilizada, devolviendo el brillo al aliento del dragón. Drago, agradecido, prometió proteger a sus nuevos amigos. Y así, en su castillo, el dragón, el caballero y la bruja aprendieron que juntos, podrían superar cualquier adversidad.
La verdadera valentía se encuentra en el conocimiento y la sabiduría, no solo en la fuerza.